martes, 21 de diciembre de 2010

In memoriam William Niño Araque


Foto tomada en el helicóptero pasando por el sur de Caracas.

Sábado 18 de diciembre de 2010

Hace unos pocos minutos leo en la prensa que murió Wiliam Niño y perplejo reviso la noticia tres veces para ver si es cierto, no vaya a ser un error de internet.

Claro, es cierto, soy yo quién no lo quiere creer.

Todo el mundo tiene una historia con William, buenas casi todas sin dudas, porque no escuché jamás de boca de nadie algo negativo de él. Obvio, algo habría, pero qué importa.

Hace 7 años lo conocí por recomendación de Boris Izaguirre, con el que iba a hacer un reportaje para El Pais semanal de España sobre la ciudad de Caracas. Y la primera persona que surgió de sus labios fue: “William Niño es la persona que será tu perfecto guía.”

Y me vine a Caracas a hacer un reportaje fascinante de una ciudad fabulosa y muy cabrona. En todo ese tiempo fotografié a gente espectacular que se convirtieron en amigos y que todavía (creo) lo son en la actualidad: Nelson Garrido, Titina Penzini, Isaac Chocrón, Fran Beaufrand, Caresse Langberg, Belén Lobo y Rodolfo Izaguirre, Román Chalbaud, Diego Rísquez, y otras anónimas personas que viven en algunos barrios de la ciudad no menos interesantes desde luego.

Y a William claro, él fue mi brújula en esta ciudad absurda y preciosa.

Vino a buscarme un sábado muy temprano en su auto gris sin pretensiones. "Iremos primero a Petare”. Yo pensé, bueno, lo veremos a lo lejos y fotografiaré los ranchos y tal. No, William metió su carro por la principal avenida del mayor barrio de “ranchos” de latinoamérica sin temor alguno, nunca me dijo nada sobre la inseguridad y yo que pensaba “ mis cámaras, tan lindas, me tendré que despedir de ellas en cualquier momento cuando se aparezca el primer malandro para robármelas”

Si, estaba predispuesto, ¿cómo no estarlo?. Mientras pasábamos por esa avenida ( que yo naturalmente no tenía idea que existía una calle ancha en ese barrio) veía en los ojos de la gente curiosidad por esas dos extrañas personas que se adentraban en su territorio: William, blanco, alto, rubio y delgado, yo, pelo largo, pulseras, zapatos de marca, raro, muy raro.
Y se paraba, hablaba con los muchachotes morenos enchancletados que salían de cualquier lado, con las mujeres embarazadas, saludaba al señor de la bodega, se sabía protegido por el halo de ser uno más de esa ciudad, y me decía “ yo soy de aquí, yo puedo pasar por aquí, ¿quién me lo impide? Yo mismo ¿no?”

Me fui tranquilizando y adaptándome a su energía. Me dediqué a disfrutar todo lo que veía. Claro, lo que me apetecía era tomar fotos de todo, absolutamente todo, pero en eso si me cuidó “ aquí no, espera, aquí si, me paro, un momento” Me contó para mi asombro que esa pequeña avenida fue hecha en tiempos muy lejanos ( la verdad no recuerdo cuán lejano). Paramos un buen rato en la plaza principal del barrio, de asfalto adoquinado y casas coloniales. "Y ¿esto está aquí?, ¿en medio de todo este rancherío?” Estaba impresionado. Tomé fotos de la ciudad vista por un habitante del barrio, y lo primero que me vino a la mente fue “ una vista fascinante, son privilegiados por semejante panorámica, y eso que en otras partes de la ciudad pagan millones por tenerla, aquí solo son pobres y luchan por vivir, se lo merecen igual”

Ok, salimos de Petare incólumes rumbo a la cota mil para ir al 23 de enero. ¡Madre mía que intenso¡ Y me acostumbré a no tener miedo, porque si William no lo tenía ¿por qué yo? Comimos unas empanadas riquísimas en un tarantín frente a uno de los bloques inmensos hechos por Villanueva. William hablaba con propiedad y con admiración de esas obras tan maravillosas. Recordamos a Le Corbusier y cómo también se le había ocurrido el plan Voisin para la reestructuración de Paris y que jamás se llevó a cabo. “Caracas pudo ser algo, y luego se la comió la corrupción petrolera” Todo el mundo sabe que los bloques del 23 de enero son una obra preciosa, pero el barrio no. Fuimos al mercado, compré unas sales para la mala suerte que me encasquetó la dependienta de una tienda esotérica y no me las eché nunca. he tenido buena suerte desde entonces.
Fuimos ese día a almorzar a Gourmet Market. Un ambiente tan diferente a donde habíamos estado, pero todo el mundo en Caracas es caraqueño. No se podía otra cosa de William que aprender. Sobre todo a querer a una ciudad.

Quedamos para otro día que fue el mejor de todos: un viaje en helicóptero por la ciudad. Nunca había montado en uno, y al ver esa cajita de fósforos con hélices, me enconmendé a todos los santos en los que no creo. Iba con nosotros el fotógrafo Niccola Rocco con el que William estaba creando un proyecto de ciudades cenitales, del cual hay ahora hay tres libros editados, Caracas, Valencia y Maracaibo.
Salimos de La Carlota y preparado con mi cámara analógica ( prefiero guardar la esencia del negativo en muchas ocasiones) allí nos subimos a la cima de la ciudad. William daba las señas al piloto de por dónde debíamos meternos para que Niccola fotografiara lo que le interesaba ese día. Fuimos de este a oeste, pasando por Baruta, Chacao, el centro “no fotografíes el Helicoide, está prohibido” William, igual lo hice, ¡cómo me dices que no lo haga¡ Vimos la Villa Planchart, estuvimos encima de las torres Simón Bolívar, de las torres del Silencio. El piloto hacía maniobras de montaña rusa y a mi me gustaba, a William no, “me asustan las turbulencias, esta vaina se cae con un vientico de nada” Fueron casi dos horas de recorrido. Ya al final me había gastado más de una docena de rollos fotográficos y no daba para más. Regresamos a La Carlota y William repite “ no fotografies nada ahí, está prohibido”

¡Pero William!

Bajé con un shot de adrenalina gigantesco, agradecido de la suerte de poder ver esta ciudad desde las alturas, como una maqueta en proyección. Surrealista. Yo no soy caraqueño y envidié sanamente el amor de William por Caracas. Dedicó su vida a una ciudad que no era suya, que para nada sintió como suya nunca. Él fue el verdadero habitante de la ciudad, puro, sin fisuras. Una buena persona y un oyente de proyectos ( incluso imposibles) muy paciente. La última vez que lo ví, estaba con T. y fue un rato agradable, le conté un proyecto que tengo en mente; rápidamente dijo " me encanta, vamos a hacerlo".

Conozco a otras personas que adoran la ciudad, y las admiro. Gente así no se tiene que morir antes de tiempo.

Mi pensamiento más recurrente cuando veo lo grandiosa que es Caracas, con la montaña del Ávila protegiéndonos a todos: ¿cómo es posible que en esta ciudad pasen cosas malas?”

miércoles, 8 de diciembre de 2010

IMAGINE



El 8 de diciembre de 1980, sobre las 11 de la noche, John Lennon y su esposa Yoko Ono caminaban de regreso a su casa en Nueva York, en el edificio Dakota, frente a Central Park. Mark Chapman, un fan desequilibrado lo esperaba en la puerta, lo dijo “Mr. Lennon”, y le descargó 4 tiros por la espalda. John murió 15 minutos más tarde en la sala de emergencia de un hospital cercano.

John y Yoko habían tenido un día maravilloso creativamente: hicieron algunos ajustes para la grabación de un futuro disco y estuvieron un par de horas con la fotógrafa Annie Leibovitz haciendo lo que fue luego la famosa foto de Lennon desnudo abrazando a Ono.

Irónicamente, ese mismo día, a las 5 de la tarde, el mismo Chapman conseguía que el artista le autografiara su último disco Double Fantasy,
30 años después, el legado que John Lennon hizo a la humanidad está aún vigente a través de las letras de sus canciones con The Beatles y las que compuso en solitario posteriormente a la ruptura de la banda. Una de esas canciones, Imagine, inspira la esencia de este proyecto. Del cómo una canción tan sencilla puede llegar a conectar los corazones de todas las personas del planeta. Del cómo unas letras utópicas pueden ser tan deseadas por todos, del cómo algunas de sus frases son leit-motiv de millones de personas, y del cómo darse cuenta de que después de 30 años, pasarán otros 30 y todavía el mundo seguirá queriendo que la canción deje de ser utopía y se convierta en realidad.
Imagine es una canción que trasciende todo tiempo pasado y futuro. Aunque es muy utópica, ya que la raza humana está dedicada a destruirse inevitablemente por naturaleza. Pero debemos tener viva la esperanza de que podemos mejorar y lograr un mundo con paz y con humildad.

I´m not the only one ( no soy el único que piensa que es posible) es la frase que remarca Lennon en el estribillo, invita a todas las personas a unirse por esta causa de buscar un mundo mejor. Nos hace poner los pies en la tierra. Nos hace pensar que no somos los únicos que nos equivocamos y que no somos los únicos que tenemos sueños y anhelos. Lo más poderoso de la canción es el efecto de humildad que proporciona: que todos podemos estar conectados por una misma energía de amor , de paz y de igualdad.

No es difícil imaginar un mundo en paz, sin posesiones, sin hambre, sin envidia y sin religiones. La paz significa tener certeza, si yo vivo con ella puedo tener alrededor esa felicidad que tanto anhelamos. Lennon sabía que solo era cuestión de “imaginárselo”. Si llevarlo a la práctica dependiera de “todas las personas” y no solamente de un grupo de líderes políticos o religiosos ¿no cree usted que este mundo sería mejor?

Todos somos “all the people”.


Gustavo Dudamel
Es actualmente el director de la Orquesta Filarmónica de Los Ángeles en Estados Unidos.



"Imagina, puedes decir que soy un soñador, pero no soy el único, espero que un día te unas a nosotros y el mundo será uno solo para todos”

"Pienso que el mensaje de John Lennon con esta canción está perfectamente vigente, es como si la hubiese escrito ayer, hoy más que nunca debemos escucharla con atención y aprender a leer entre líneas su contenido para aplicarlo a nuestras vidas


Dayana Mendoza
Miss Universo 2008. Actualmente estudia actuación en Nueva York y dedica parte de su tiempo a labores sociales con ONG´S de América Latina.



"Es fácil si tratas de hacerlo"

"La canción Imagine, nos hace recordar que somos espíritus conectados en busca de la felicidad, y que depende de nosotros vivir en paz, sin fronteras, sin guerras, sin divisiones de ningún tipo, sin hambre. Ojalá fuésemos más los que creemos en este sueño. Vivimos en un mundo en colapso, pero darse cuenta de eso, y hacer algo al respecto son dos cosas muy diferentes. Aunque hay esperanza, aun podemos lograr despertar a la gente de los vicios, pero no sabemos si ellos quieren ser despertados."

Raisa Beaufrand
Diseñadora



"No hay infierno debajo de nosotros"

"Es una frase muy poderosa. Para mi se refiere a que solo tenemos esta vida, no hay infierno ni paraíso al morir. Debemos vivir el ahora y disfrutar el presente, hacer de nuestra vida un paraíso y no un infierno"


Michael Hearst.
Músico del grupo OneringZero y productor independiente.



"Viviendo al día"

"La canción es intensamente relevante, han pasado 30 años y sigue siendo muy inspiradora. Aunque es relativo, podemos escuchar la canción y decir que algunas cosas son imaginación, sueños imposibles, que no existen. Unas cosas mejoran y otras no, pero hay demasiadas cosas gastadas y anticuadas aún persistentes en la sociedad como el machismo o la discriminación racial. Al igual que la pobreza, el hambre y las desigualdades en el mundo lamento ser tan realista, pero no creo que vayan a desaparecer"

Nelly Reiffer, escritora
"Imagina que no existe el cielo"
Creo que por naturaleza, el ser humano es un poco loco. Muchas personas encuentran razones para vivir y para ser moralista participando en religiones que prometen que hay una vida después de ésta. Me gusta creer que las personas sientan que pueden ser liberados por solo tener esa idea.



Jonathan Dixon, chef
"Que no exista el hambre en el mundo"
"Como mucha gente, pienso que la canción podría ser un poco exagerada, y la mezcla compleja de emociones están hechas con un sentido principal de mero optimismo. Pero solamente el hecho que esto haga que la gente tenga un “click” en sus cabezas, señala que existe un agujero emocional que la gente está deseosa de llenar."

Patricia Velásquez
Reconocida actriz y modelo venezolana. Compagina su carrera artística con su fundación Wayúu Tayá dedicada a mejorar las condiciones de vida de los grupos indígenas en la frontera colombo-venezolana.



"I´m not the only one ( no soy el único) es la frase que más me golpea de la canción"
"Imagine es una canción que trasciende todo tiempo pasado y futuro. Aunque es muy utópica, ya que la raza humana esta dedicada a destruirse inevitablemente por naturaleza. Lo más importante radica en prestar atención a la persona que está a tu lado y dejar de pensar tanto en uno mismo."

Rachel Shukert, escritora



“El mundo donde viviremos será uno solo”

"No creo que la esperanza para que el “mundo sea uno solo”, tenga que ser tan trabajosa. Existen personas buenas y malas en el planeta y vamos hacia una polarización en las ideas mucho más marcada. Imagine te dice que no debemos pensar en divisiones de raza ni de reigiones. No estamos apenas ni a medio camino de conseguirlo. Aunque lo que nos une es querer lograr esa utopía."

Carlota Sosa.
Modelo española radicada en Nueva York.



"Imagina un mundo sin posesiones."
"Por que creo que identifica a la sociedad de hoy en día. Creemos que podemos poseer a las personas y que somos más felices teniendo más cosas materiales y no miramos los problemas y el esfuerzo en conseguirlas, como dice el refrán: “No es más feliz el que más tiene sino el que menos necesita.”

Edgar Ramírez
Actor venezolano radicado en Los Angeles, Protagonista del filme francés “Carlos” que narra la vida del terrorista Carlos Ilich Ramírez “ El Chacal”

"Imagina que solo hay un cielo encima de nosotros"
“Above us only sky”, (arriba de nosotros solo existe un cielo) porque siento que el cielo es infinito y eso me llena de ilusión.
Muchos intentarán hacer la guerra, mientras muchos más intentaremos hacer la paz. El legado de imagine estará siempre vigente. La esperanza es como el sol que sale todos los días por la mañana: inevitable.
Intentar practicar la gentileza, la tolerancia y la compasión tanto como me sea posible, en cada minuto de mi vida es mi misión en la vida."



Bob Thurman
Es el presidente de la Casa del Tibet de Nueva York. Activista declarado en favor de los derechos de los tibetanos, da charlas en todo el mundo llevando un mensaje de espiritualidad que no solo es válido para el Tibet sino para cualquier minoría oprimida. Es padre de la famosa actriz Uma Thurman.



"Imagina a todo el mundo viviendo sus vidas en paz"

"Pienso que una de las cosas de los malos gobiernos de hoy en día es que intentan hacer que la gente no se imagine nada, que podemos estar en paz y que el mundo puede estar en paz. Eso hace que la gente sienta miedo y asumen que el resto del mundo está asustado y listo para atacarlos. Y entonces apoyan por defecto a sus líderes destructivos ( porque no les queda otra) en cualquiera de sus delirios militares."

Sophie Auster
Modelo, cantante y actriz. Hija del famoso escritor Paul Auster y la escritora Siri
Hustvedt.




"Imagina, solo soy un soñador pero no soy el único"

"Me identifico con esta frase porque determina lo que cada uno de nosotros desea, que no más que ese ideal utópico de una vida mejor. Es maravilloso pensar que las personas se puedan imaginar lo que el mundo puede ser, a pesar de que hay guerras y conflictos en las noticias a diario, y saber que no somos animales, que somos seres pensantes que podemos estar conectados por algo positivo."

Carol C
DJ y cantante de la banda neoyorkina Si Sé.



"Soy una soñadora, imagina a todas las personas compartiendo todo el mundo"

"La canción tiene un mensaje muy positivo: imaginar un mundo en donde no haya hambre ni guerras ni que nadie sufra. Algo que obviamente no pasa en la actualidad. La frase que me viene a la cabeza en primer lugar es “ imagine all the people sharing all the World” ( imagina a todas las personas compartiendo todo el mundo) Es una linda y simple utopía, pero ¡ qué difícil de lograr! Pero eso no me hace sentirme menos soñadora y creer que al menos en nuestros “pequeños mundos” podemos lograr algo parecido. Al final se trata de eso, de lograr armonía a tu alrededor, y si consigo algo de eso sé que un poco se esparcirá al mundo entero. Hay muchas cosas negativas en el mundo, pero me reservo un espacio para soñar que las cosas pueden mejorar."


¿Anónimos? NO, All the people

Estos chicos estaban de vacaciones en Nueva York, venían de Perth, Australia, los pillé en el barrio italiano.



A esta hermosa familia los encontré en Park Slope, en Brooklyn.


Este es un chico francés que se llama Gullon, estilista, muy simpático.



Ella es Roxy Cullen, dependienta de una tienda en Soho.




NOTA 1: Uf, este reportaje tuvo una preproducción mastodóntica que incluyó envío de cientos de emails a personas famosas de los Estados Unidos. Unos contestaron y otros no. Otros fueron polite, otros fueron antipáticos. Annie Leibovitz nunca contestó, Michael Stipe sí lo hizo y se disculpó por no estar en las fechas en que estaría en NY, al igual que David Lachapelle. Sean Lennon le encantó la idea y se lamentó igualmente de no poder participar por su agenda copada, igual su hermano Julian. Numerosos agentes de estrellas me dieron un portazo en la cara diciéndome que sus representados no estaban "available". Algunos contactados fueron Natalie Portman, Isabella Rosellini, John Malkovich, Debbie Harry, Yoko Ono, Nicole Atkins ( dijo que si pero estaba de gira en otra ciudad) Juliette Lewis, Rufus Wainwright, Robert Wilson ( contestó amablemente su manager), Antony and the Jhonsons, Carolina Herrera ( casi casi) y bueno, ahora olvido tantos y tantos emails que envié, !demasiados!. Infinidad de niveles para llegar a tanta gente y bueno, no fue fácil pero tampoco fue difícil.
Todos los que aparecen aquí son mis amigos y otros que no lo eran y ahora sí lo son. Definitivamente I WAS THERE.

Mi idea fue hacer un homenaje a un hombre que para nada era perfecto, pero que dejó un legado en toda la sociedad, en nuestras familias sobre todo, y luego trasladado a nuestros corazones. Y logré algo, que tiene un valor especialísimo para mi.

Gracias a Eloísa Maturén por la paciencia y la entrega total, a Rosa Alvares por facilitarme algunos contactos a través de España y ofrecerme sus correcciones en los textos, a Edgar por ser tan especial y paciente, a Gustavo por ser tan él mismo, al señor Bob, que nos abrió los ojos, a Michael Hearst por su relajada forma de ser y darme los contactos de Nelly y Rachel, a V.J. por ofrecernos su preciosa casa ( ver la naturaleza en las mañanas por la ventana en NY no tiene precio) y darme algunos tips con algunos famosos, a Luis Guillermo por ofrecerlo !todo¡, a Fran Valera por su forma de ser que me fascinó y por esa cena tan espectacular que nos hiciste, y gracias a algunos agentes de famosos que respetaron y valoraron positivamente mi idea y mis peticiones.

Y sobre todo gracias infinitas a Raisa ( Tita), que hizo los carteles, tradujo emails, habló con algunos agentes, aguantó con estoicidad mis dudas, mis desilusiones y mis rabias. Que hizo que todo esto fuera posible. Lo hicimos juntos.


NOTA 2: este reportaje se publicó en dos diferentes versiones. Una en la revista Todo en Domingo del diario El Nacional de Caracas y otra en la revista DOM que sale con el Periódico de Cataluña de Barcelona, España.

El inicio


Atlantic City. Octubre 2010.

Se levantó por la mañana muy temprano. En la cocina estaba Matilda, la señora de la limpieza que no se inmutó al verlo solo en calzoncillos, siempre acostumbrada a verlo desnudo desde que era pequeño. Sin pedirlo, Matilda le preparó unas tostadas con mantequilla y mermelada de frambuesa y un zumo de naranja recién exprimido en una máquina que J.J. odiaba por el ruido que hacía, pensó “ esa puta máquina ya no da para más”. Volvió a su habitación. Pasó al baño a defecar y tomó uno de los varios libros que estaban al lado del water, esta vez se interesó por un diccionario de sinónimos y antónimos y se preguntó qué diablos haría eso allí.
“Mi madre, siempre tan preocupada de que utilicemos las palabras justas para todo.” Se fumó un joint de marihuana mezclada con picadura de tabaco holandés que le había regalado Andrés y le molestó que no le supiera a como estaba habituado: sin mezclar, solo papel de bolsa marrón y saliva. Sin embargo, el efecto de la droga fue poderoso porque perdió la noción del tiempo que pasó en el retrete, y cuando se limpió e hizo el chequeo posterior de suciedad en el papel higiénico, su mierda estaba ya seca. "¿Cuánto tiempo habré estado aquí cagando?", no usaba reloj ni le interesaba particularmente la hora, y mucho menos ese día.

viernes, 3 de diciembre de 2010

LOVING LAS VEGAS



Las Vegas es modernidad, nostalgia y también cierta decrepitud. Todo parece posible en Sin City, “la ciudad del pecado”, un oasis para adultos en medio del desierto americano.


No hay frase más conocida que la famosa “Lo que pasa en Las Vegas se queda en Las Vegas”. Es, sin duda alguna, multiuso. Funciona para todo y, más que nada, para todos: acomplejados, arriesgados, vencedores, famosos y gente con o sin suerte. Estar en la ciudad es como tener una especie de tarjeta inmoral para hacer lo que te dé la gana. Desde el punto de vista psicológico, Las Vegas se convierte en salvoconducto para quienes tienen la tentación de pecar o de traspasar los valores “morales” de la sociedad.



Es el destino habitual para portarse mal y obtener el perdón inmediato. Se suele pensar, erróneamente, que allí no existe la culpa y se vive todo en alta intensidad. Es muy común la siguiente historia: te gusta la esposa de tu jefe. Y tú a ella. ¿El plan ideal? Irse a Las Vegas. Bastan cuatro días para liberar el deseo y vivir el desenfreno a tope. Todo vale. Eso si, al regresar, se acabó. Se quedó en Las Vegas. Genialmente perfecto.

A grito pelado

Chicos y chicas, universitarios generalmente borrachos, gritan desaforados por allí donde pasen, llegan de todas las ciudades norteamericanas en busca de “aquello que no se les ha perdido”. Jubilados en carritos eléctricos que, cual juego de Nintendo, se llevan por delante a la gente en las aceras. Cantidades industriales de imitadores de Elvis Presley haciéndose fotos por un dólar. Y más allá, las parejas que buscan casarse de manera divertida, o simplemente rápida, a buen precio, y obteniendo la legalidad que haga falta. Sin dudas, todo es posible.



Las Vegas es parada obligatoria para quienes quieren divertirse y tener experiencias únicas. Ideal para solteros, parejas y almas descarriadas. “Siempre hay un sitio nuevo que descubrir. Me encanta esa especie de lema de la ciudad que invita a ser libre, a disfrutar el momento... asegura Paula Allen, showgirl del espectáculo Jubilee en el hotel Ballys. “Tienes que tener cuidado cuando dices que eres bailarina en Las Vegas, porque la gente puede equivocarse. Soy una chica muy normal, con una vida sencilla. De hecho, cuando me quito las plumas, las pestañas y el maquillaje soy irreconocible”.









¿Me da una boda, por favor?

¿Quién ha visto una novia vestida de blanco y embarazada de 7 meses, entrando en una capilla de cualquier lugar de España? ¿O a una pareja que bien pueden sumar 160 años entre los dos y que los case un torero? Pero la boda más popular es aquélla en la que Elvis te canta “Love me tender”. Su discurso parroquial está lleno de frases de sus canciones más famosas. Al preguntar si aceptas a tu esposa, añade: “Sin mente suspicaz”; cuando le pregunta a ella, acota: “Y no dejarlo como un perro abandonado”. Al finalizar, y si tu bolsillo aún suena y pesa, Elvis sin dudarlo cantará más para ti.





Según cifras del estado de Nevada, más de 120.000 parejas se casan al año en la ciudad. Decir “si quiero” en Las Vegas es demasiado fácil. Aunque no sólo es fácil casarse... también lo es divorciarse. Tanto como perder todo tu dinero en las maquinitas de cualquier casino. ¿Que tienes prisa y no estás para perder el tiempo con cuestiones románticas? Tranquilo, en Sin City las fast weddings también están incluidas en el menú gracias a una ventanilla abierta toda la noche en la que es posible casarse y continuar el viaje. Se llama el Túnel del Amor y es la que eligió, por ejemplo, la actriz Joan Collins. Ah, y quienes ya estén casados y no quieran perderse una boda made in Nevada, se ha puesto de moda desde hace pocos años la renovación de votos, que reafirma el amor que se tienen las parejas de todo el mundo. Y es que en esta ciudad todo es cuestión de tiempo y dinero. ¡Y el matrimonio no se queda atrás! En Las Vegas lo pides como si se tratara de una hamburguesa más. ¿Tú que pedirías?









No hay lotería en Las Vegas

No cabe duda de que esta ciudad da mucho juego... en todos los sentidos. Sin embargo, como cualquier parque de atracciones, podrás conocerlo como la palma de la mano en sólo cuatro días. Porque la gracia de Las Vegas, lo que cualquier visitante quiere experimentar y llevarse como perfecto souvenir (juego, sexo, alcohol, compras...), reside en The Strip, como es conocido Las Vegas Boulevard, una vía kilométrica que recorre la ciudad de Norte a Sur, y donde se concentran la mayoría de los hoteles y casinos más famosos.



Puedes recorrerlo en un día si tienes la fuerza física. Es un desfile interminable de americanos y turistas europeos apabullados por la arquitectura mastodóntica de sus edificios: el Luxor, el Caesar’s Palace, el Bellagio, el Paris, el New York, New York, el Planet Hollywood. Junto a los inmensos edificios clásicos (sus dueños hacen todo a lo grande, generalmente sin la más mínima concesión al buen gusto) se levantan los más nuevos, arquitecturas llevadas al máximo, edificaciones que parecen colgar en el espacio. Hasta el mismísimo Frank Gehry tienen su aporte de láminas de platino al paisaje de derroche arquitectónico.



Parece mentira que a pocos kilómetros de esa jungla de asfalto y cristal haya otra visión de Las Vegas: la de los museos, los planes con niños, la que mira a la naturaleza, la que está cerca del Gran Cañón o del Valle del Fuego, con sus formaciones rocosas impregnadas de un color rojo que no puede dejar indiferente a quienes las contemplan. Y es que en este rincón del planeta, a la vuelta de cualquier camino o de cualquier esquina, algo te sorprende. Incluso la suerte... Poker, Black Jack, ruleta, tragaperras. ¡Cualquier método es recomendable para sentirte, aunque sea por un rato, una persona afortunada! Cualquiera menos la lotería. Porque en la ciudad del juego y el pecado, no hay lotería en ninguna tienda . Aunque vendan de todo. “¿Y para qué quieres lotería?”, nos dice la dependienta de un establecimiento donde encuentras cualquier cosa. “La suerte aquí está en cada rincón, con una moneda de 25 centavos puedes ganar 1 millón de dólares”. ¿Quieres probar hasta el último minuto tu fortuna? Ahí va un último shot de adrenalina: en el aeropuerto hay mesas de Black Jack y maquinitas para hacer más entretenida la espera...





That’s Las Vegas! Entretenimiento en estado puro, ofrecido en forma de casino, gran hotel, espectáculo musical o club de strippers. Una isla artificial en medio del desierto, hecha a base de cemento y cristal, con arquitectura de vanguardia y el kistch más rabioso. Un lugar donde es posible ganar mucho dinero y perderlo al mismo tiempo; conseguir chicas, tener sexo fácil, casarte en 10 minutos y hacerlo como se te antoje.





Muchas luces, derroche, emoción y depresión... Y saber que puedes ser millonario en experiencias en tan sólo un segundo hace de Las Vegas una ciudad imperfecta pero genial a la vez.



Nota: Este reportaje se publicó en la revista Dominical del periódico de Catalunya en España hace dos meses.