lunes, 28 de enero de 2008

Ciudad de Diosas







Hacer una producción de mujeres vestidas solo con un bikini en medio de una favela tan conocida por su extrema violencia (que se vivió allí durante las décadas del 70, 80 y 90) parece cosa de locos. La verdad es que ahora no es ni la mitad de peligrosa, pero los cohetes que tiran los niños mensajeros de los traficantes, para alertar que la policía está cerca, no es un juego. Por eso, todos los días es un peligro estar en la calle en Ciudad de Dios pero aún así llegué a la conclusión de que tenía mas seguridad allí que en cualquier otra parte de Rio de Janeiro.....solo si la policía no entraba en el barrio pegando tiros a mansalva.
Y para eso los cohetes, todo el mundo está atento en el barrio porque los policías, con sus armas de guerra puede que estén cerca; quizá no pasaba nada, pero mucho cuidadito había que tener. En el medio de todo esto, yo, me sentía el más extraterrestre del mundo, mezclado entre casas que se caen y otras que no tanto, jóvenes con cara de mala leche, mujeres embarazadas y adultos que se tratan de ganar la vida de la mejor manera, algunos honradamente y otros ya se sabe, un poco no tan honradamente. Y los niños, siempre por todos lados que cuando ven una cámara se vuelven locos. Tenía que apartarlos como si de groupies alocados se trataran y yo la estrella de rock venida del planeta más lejano.
Me preguntan si vengo de América y alucinan cuando les hablo en portugués, y al contestarles mi procedencia (España) me preguntan algunos que "¿seguro tengo que tomar varios autobuses para llegar allí no?" Eso si, siempre hay que preguntar antes de hacer una foto, corres el riesgo de fotografiar a alguien que no desea salir retratado, así sea de perfil.
Tony Barros, mi contacto y mi anfitrión ( dormí 24 días en su casa-rancho que queda en la famosa quadra 15, al lado de la casa el temido Zé Pequeno, protagonista de la película famosa con el nombre de la favela) es también educador social y fotógrafo, con 40 años es un todoterreno y un tipo súper legal. Es el director de la escuela-proyecto Lente dos Sonhos, que empezó hace 4 años cuando Tony hizo una producción fotográfica por el día de los enamorados que se publicó en un portal brasileño
( www.vivario.com.br)
La escuela tiene como objetivo dar oportunidades de crecimiento profesional a los niños y jóvenes en comunidades del norte de Rio de Janeiro sobre todo en Ciudad de Dios, buscando alternativas de trabajo en el mundo de la moda, televisión, publicidad o el cine. Con todos esto alicientes la idea de hacer esta producción con las 6 mejores modelos de la escuela, era un reto en toda su esencia.
Apenas digiero el shock que me produce estar en Ciudad de Dios, y buscando locaciones, paso por los lugares que recuerdo haber leído en el libro de Paulo Lins que inspiró la película: la plaza donde aparecían los muertos de la noche, las calles que eran testigos de innumerables ajusticiamientos de "malandros" a manos de la policía y callejuelas por donde los delincuentes huían y hoy en día huyen. Muchas casas tienen impactos de balaceras recientes y antiguas, pregunto a Tony si estamos en un lugar seguro y él "quédate tranquilo, aquí no pasa nada, todo el mundo se conoce y ya saben que estamos haciendo un trabajo para el bien de la comunidad" yo insisto, ¿quiénes son los que saben? " los traficantes" Pues nada, no pregunto mas.

Un río que tuvo que ser alguna vez limpio atraviesa el barrio y delimita lo mas mísero con la pobreza standar. Hemos encontrado las locaciones sin ir demasiado lejos, la favela es un plató perfecto. Hago un precasting con las chicas para probar los divinos bikinis brasileros. Les sientan de maravilla, y a ellas les gusta que mientras sea mas pequeño, mejor, así se resalta mas la perfección de sus culos, que parecen de piedra.
Una de las sesiones la hacemos en una de las partes mas peligrosas del barrio, llamada "Rocinha 2", donde las casas se sostienen a duras penas y no existen las cañerías, solo un pequeño riachuelo en la parte de atrás de las mismas que sirve de lugar de descarga de todo lo imaginable. Vamos allí en moto-taxi ( los moto-taxis nacieron primero como mensajeros de los traficantes y ahora son indispensables en todas las favelas de Rio, andan a toda pastilla por las callejuelas y se conocen todos los rincones) La imagen es surrealista, 15 motos dirigiéndose al mismo lugar es algo que a los habitantes les parece raro, y saben que algo pasará allá donde vamos. Las chicas van en bata en la moto y dejan ver piernas y bustos por el viento. Llegamos y empezamos, no tardan en aparecer los niños y toda la gente de alrededor se ríe, los chicos se babean. Tenemos poco tiempo, la luz se va y mucha gente rara se acerca. Un maleante se acerca gritando " ¿qué carajo pasa aqui?" e inmediatamente el dueño de la parcela donde estamos trabajando le dice que se vaya, si no quiere que le avise a fulanito. El delincuente con la mano dentro de su pantalón no le queda otro remedio que irse. Tony me dice "ese es un bandido coca-cola, ya perdió la presión" Yo pienso que deberíamos terminar cuanto antes. Pero no, se me antoja hacer otra foto en un lugar donde están los grafittis de 5 bandidos que murieron asesinados por la policía. Las chicas ya están nerviosas pero yo ni caso. Algunos chicos hacen fotos con sus celulares y ahora si las chicas se molestan. Decido aligerar y doy por terminada la sesión, de nuevo, a los mototaxis que a toda velocidad nos depositan en casa.
Allí donde íbamos a hacer las fotos, el mismo guión, revolución total, por ver a las chicas que están buenísimas en bikini en el medio de la calle, y a un tipo (YO) que no para de pegar gritos. Llega la noche, se oyen tiros pero nadie en la calle parece notar nada, sigue todo igual, Ciudad de Dios es como un oasis del medioevo en plena Rio de Janeiro, contradictoriamente segura, caótica y muy humana.


Gisele Guimarães nació en Ciudad de Dios en 1984. Tiene muchos sueños, viajar y ser conocida fuera de Brasil, le gustaría ser estilista y tener su propia marca de ropa. Darle a sus padres lo que no tienen, una mejoría de vida. Admite que no quiere ser famosa, solo mejorar su estilo de vida. Es la mano derecha de Tony Barros, se encarga de formar a las niñas dando clases de pasarela y es la que se ocupa de que todo funcione en la escuela. Actualmente forma parte del equipo de modelos de la famosa agencia Elite Brasil.


Ludmila Gomes, 18 años, nació en Ciudad de Dios y a los 12 años ya pensaba en ser modelo. Alos 14 años hizo su primer trabajo en un desfile. Dos años después Tony Barros la convenció de pertenecer al proyecto Lente dos sonhos. Su sueño es poder viajar. Su madre murió hace tres años ( ella vio como murió, una bala perdida en la favela acabó con su vida) y vive sola. Desea salir de la favela, está totalmente desencantada con la violencia diaria. Le gustaría seguir como modelo, pero su prioridad es sobrevivir, y ser madre.


Joyce Caetano, 21 anos, y hace 5 años batalla para conseguir un puesto en el difícil mundo del modelaje. Desfila mucho para diseñadores brasileños. Desde los 15 años ha soñado con ser modelo. Su sueño es realizarse profesionalmente como modelo para hacer todo el dinero que pueda. Trabaja como recepcionista en un hospital. Es las mas estilizada y mas académica de todas.


Débora Carvalho tiene 22 años y es parte del proyecto Lente dos Sonhos desde su fundación en 2001. Comenzó su carrera como modelo a los 15 años haciendo un curso en el barrio. De momento le gusta su trabajo como modelo que compagina con un trabajo en el Hard Rock Café como relacionista pública, que le da oportunidades de conocer mucha gente. "El trabajo en la escuela con las chicas me da ánimos para seguir haciendo este trabajo y desearía profesionalizarme" Su sueño es que sus padres que están divorciados, se junten de nuevo. Es las mas pícara del grupo, le encanta cantar y bailar "funk"


Shirley Ribeiro, 20 anos, nació y se crió en Ciudad de Dios y hace 4 forma parte del proyecto. Siempre está lista para aprender cosas nuevas, además de formar parte de las producciones que la escuela demanda, trabaja en un establecimiento de comida rápida. Espera acumular experiencia para poder hacer carrera como actriz, su gran sueño, y darle confort a su familia con estabilidad económica. Tiene una personalidad muy romántica, le encantan los filmes de historias de amor.


Carol Jackson tiene 18 años y su sueño es ser pop star. Como casi todas las demás modelos, vio en el modelaje una oportunidad para hacer algo que la pueda sacar de la favela. Y poco a poco, lo está consiguiendo, pronto se mudará con su compañera de casa, Ludmila Gomes, para un barrio menos conflictivo. La benjamina del grupo, parece la más inocente pero detrás de esa apariencia esconde una seguridad propia de una tigresa.







Texto y fotos: Luis Cobelo
Asistente de fotógrafo: Edurne D.
Maquillaje y peluquería: Janne Louise
Bikinis: Avain Confecçoes ( www.avainmodapraia.com.br )


Artículo publicado en las revistas Maxim de USA ( en español), España, Filipinas, Bélgica y Korea y en las revistas Todo en Domingo de Venezuela y Primera Línea de España. ( entre 2005-2007)